A solo semanas de estar en vigencia, la Ley 1040 o Ley de Agentes Extranjeros ya logró suspender dos organizaciones y amenaza a decenas más.
La Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH) informó que no se someterá a la Ley de Agentes Extranjeros, aprobada por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo y anunció la suspensión de sus operaciones.
Con su cierre, periodistas y medios de comunicación independientes pierden una organización aliada que promovía la capacitación constante, auspiciaba investigaciones periodísticas y que premiaba la excelencia del periodismo en cada uno de sus formatos.
El comunicado de suspensión de operaciones fue leído por Ana Eliza Martínez, miembro del Consejo Directivo:
“La Fundación Violeta B. Chamorro, comunica al pueblo de Nicaragua, a la comunidad internacional, organismos de derechos humanos y prensa nacional e internacional que, ante la aprobación y vigencia de la Ley de Agentes Extranjeros y su normativa, su Asamblea de Miembros y Consejo Directivo han decidido suspender operaciones”, anunció la Fundación en conferencia de prensa.
Cristiana Chamorro, fundadora de la organización y ex directora ejecutiva, declaró este día como de Luto Cívico al verse obligadas a cerrar por las pretensiones de una ley que califica de inconstitucional
“Ortega con esta ley de extranjeros está asesinando legalmente a la sociedad civil de nicaragua con amenazas de multas y otros agravios. Es una aberración jurídica que no admitimos en consecuencia con nuestra dignidad y estamos seguros que Nicaragua volverá a ser república” dijo Chamorro, quien debió referirse al cierre de la fundación el propio día de su cumpleaños.
Pen Nicaragua, otra organización que cierra
Periodistas y Escritores de Nicaragua, PEN Nicaragua, informaron la suspensión de sus operaciones horas atrás.
Desde la organización, emitieron una carta abierta que explicaba los lamentables motivos de suspender sus tareas: “Ninguno de nosotros se considera agente extranjero. Somos nicaragüenses que sólo hemos querido el desarrollo cultural de nuestro país. Por estas razones, la Junta Directiva que presido y la Asamblea de miembros, hemos decidido suspender indefinidamente el centro PEN en Nicaragua” informaron.
Miembros de la organización están claros de los fines y trabajo responden e ideales humanitarios y libertarios por los que trabajan, pero también están conscientes de que esta vinculación haría que el Estado los considerará agentes extranjeros, explicaron en la carta.