Brasil, con más de 150 millones de personas aptas para votar obtuvo un 20% de abstención al voto. Llevando al país a una segunda vuelta de votaciones, este próximo 30 de octubre, como lo estipulan las leyes Brasileñas si ninguno de los candidatos obtiene el 50% de los votos válidos.

Al inicio de las votaciones, Bolsonaro iba liderando el conteo. Una vez la población votante llegó a su 70% Lula da Silva dio un giro a las urnas llevándose la ventaja, sin embargo no obtuvo más del 50% de votos, llevando al país a una segunda elección.

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El partido de izquierda de los trabajadores de la mano de Lula da Silva, ya había tenido la presidencia de Brasil en 2003, período que terminó en diciembre del 2010 y en estos 8 años donde Lula ejerció la presidencia, implementó reformas de cambios sociales y económicos en el país sudamericano. Su gobierno fue considerado para los brasileños como clave para los avances económicos del país.

Por su parte, el Partido Liberal liderado por Jair Bolsonaro, de derecha extrema quien ganó la presidencia en enero de 2019 hasta la actualidad. Fue un presidente fuertemente criticado por su retroceso en la protección de los grupos indígenas de las amazonas y su respuesta ante la pandemia de Covid-19, ganándose la negativa del país, perdiendo así la ventaja de las elecciones presidenciales de este 2022.